Cuesta arriba
la invisible apariencia
de un sueño
del alma desprendido,
perdido en los pasos,
en cada escalón
acercándolo al olvido.
Mis pies grávidos
hacia el subsuelo
donde van los pasos
escalera abajo
en vacíos peldaños,
luminiscente sombra
que fue estampa,
el diario solo menciona
abandono de fronteras,
incisión de venas.
En la baranda
solo el legado
de huellas digitales
separándose en
direcciones impares.
Escaleras sin vida
residuo de tormentas,
los fantasmas
se agolpan
a mi puerta
desangrando el camino
que ha de llevarme
de regreso
a mis infiernos.
martes, 29 de enero de 2008
Escalera vacía
Un delirio de
Adrian
en
18:12
1 Intranquilos
Poemario: Desde el ocaso del alma
lunes, 28 de enero de 2008
No me alcanza la sangre
No me alcanza la sangre
para tanto viento caníbal
que mis entrañas devora.
Crujen las tablas del escenario,
roca dulce que en mi pecho habita,
pesado el paso de mis manos
y mi sonrisa es mueca
calmando el espejo del silencio.
Si pudiera haría isla
sin mar ni vida
cremación de penas absurdas
destrozo de venas sin paraíso
corriendo al abrazo tardío.
No encamino el verbo
ni de soslayo cultivo nubes,
reaparece el siglo que duele
en los dedos que sobre párpado cerrado
dijeron adiós al frío cuerpo.
Llevar la muerte en los ojos,
arrastrar la mortaja ignorada
fue viaje sin regreso
al presente futuro que me anima,
alma moribunda en gris tarde
volviéndose la nada,
ni un recuerdo.
Un delirio de
Adrian
en
18:10
0
Intranquilos
Poemario: Desde el ocaso del alma
lunes, 21 de enero de 2008
Del sueño pretérito
Raído el manto
de la noche
que cubre
el ladrido
del espejo,
supongo
una grieta
donde cayó
el amasijo
que fue
la vida
no vida
que arrastran
mis tobillos
fracturados.
Al borde
de una pesadilla
está la almohada
que ahogó
el espanto
de un silencio,
mortal caricia
de Caronte
sobre mi hombro.
Sobrevivo sin alma,
desnudo el hígado
y los tendones
que abrigan
la resistencia,
morfina
para mis visiones.
Para qué
tanto verbo,
ilusión óptica
de gris sonrisa,
carne postal,
afrodisíaco desechable,
una tumba
no repara
relojes abandonados,
el tiempo
escupe el rostro
tras gélido
discurso
de huesos rotos.
Hacer mariposa
succionar glóbulos
que la distancia
alberga en dispar
evento
de almas muertas
fiesta de nosotros,
la nada
del olvido,
el reflejo
transparente
y la pupila
de sal diluida.
Despierto,
acalambro mis manos
con el tonto
saludo refugio.
Todo es vivir
lo que no fue,
ser lo que
se vivió,
presente,
pretérito,
tan confundido
estoy...
Mi huella
no es huella,
solo lamentos
que sobre
las esperanzas
han muerto.
Un delirio de
Adrian
en
18:08
0
Intranquilos
Poemario: Desde el ocaso del alma
miércoles, 9 de enero de 2008
Quebrado en la nada
Desde el asfalto hacia el mar
deambula la pupila dilatada
de un pretérito tirano
cráter de grito en suspiros.
Desahogo el temblor
de rodillas quebradas
con cada golpe comprado
herencia del vicio masoquista.
Escamotear una mirada,
sonreír el hielo enlodado
tras cada cámara oculta
y el alcohol del rechazo.
Un cigarro distante,
bocanada disipando entrañas.
Mi corazón queda cortado
por la metralla de luces
robadas al silencio
del vivo sepulcro
que grabado tu nombre
desgarró mi tráquea.
Fútil descanso
de noches sin presente
estrujada luna
espejo de mi rostro.
Cada vértice de un llanto
es dimensión oculta
de mis vísceras adyacentes
implorando sangre
para las venas.
Encadenado el húmero atrevido
al cúbito que fabricó
saludos y abrazos a lo lejos,
con médula escurrida
por la piel maldecida.
Solo el salitre
aguarda en mis pestañas,
gema tras lóbulo ocular
amplificando olas
del tintero que escucho
destrozándome,
lanzándome al vacío
que en la nada vivo.
Un delirio de
Adrian
en
17:59
0
Intranquilos
Poemario: Desde el ocaso del alma
jueves, 27 de diciembre de 2007
Muriendo
Ya no soy,
diástole y sístole ausentes,
línea horizontal
de pulsaciones alternas,
todo se detiene
y no hay luz
ni túnel al cerrar los ojos.
¿A dónde voy?
A la nada,
carente de cuerpo
y alma que sonría,
ni el crucifijo regalado
abre las puertas al cielo.
Todo es materia
descomponiéndose,
somos la energía cósmica
del origen del universo,
de allí venimos
hacia allá vamos.
Átomos de cuanto pesamos
enriquecen el suelo,
abono del hongo comestible,
banquete de artrópodos nocturnos.
No estoy,
no soy sombra
ni luz distante,
el simple eco
de un dictámen reciente,
rutina de la no vida.
Juntar cada nube
no traerá el diluvio
que salvará el mundo,
irrespirables somos,
saqueadores de tumbas,
presos de nuestras dudas.
Irracional espejo que no miente,
la paz aparente del sepulcro
no menciona las cartas
escritas al olvido,
la flor que hizo la rutina.
Ya no soy,
el quebradizo occipital
observó la ceniza
disparada de sus hermanos
y así, en verde paisaje,
sonámbulo de ausencias
cavar respuesta profunda
que venga al rescate
de lo que ya no siento.
Hiedra férrea del recuerdo,
neurona decapitada
con alas de cuervo,
y el graznido de voz conocida
despide duelo
de mis átomos el aire fundiendo
en una lágrima
al mar de mis sueños muriendo.
Un delirio de
Adrian
en
9:34
0
Intranquilos
Poemario: Desde el ocaso del alma
lunes, 24 de diciembre de 2007
Cuerpo prestado
Despertar sin vida,
abrir la mañana con ojos prestados
y ese desayuno en la cama
con manos que no son mis manos,
paladar de lengua ajena.
El grito que no es mi voz
escurre la locura de esta pesadilla,
ocupación enfermiza
de otro cuerpo prestado.
La sonrisa es mueca
de surcos en la cara
con cada rastro de sangre
oculto bajo la alfombra
donde yace el pasado.
Y la música… la misma música
recurrente y enajenante
movilizando la apatía,
patético discurso en la silla dibujado.
Caer, romperse los dientes
junto al cráneo inconciente
y empezar una vez más,
pedir prestado otro cuerpo,
ser locura itinerante
por los pasillos del tiempo
rasgando cada árbol de raíces secas.
Un delirio de
Adrian
en
21:17
0
Intranquilos
Poemario: Desde el ocaso del alma, Despertares, Somos
viernes, 21 de diciembre de 2007
Moribunda sinapsis
Moribunda sinapsis lunática
se aloja cerca del parietal derecho
donde la bala crucificó huesos
y cada astilla santuario sangriento.
Es el coma de ojos abiertos,
de sonrisas hegemónicas y crueles,
porque donde el diafragma se detiene
un quejido es un suspiro
y cada palabra jeroglífico nuevo
que desnuda tu sexo hiriente.
Rapto de la cabellera ajustada,
vacío de órganos silentes
palpìtando sobre mesa ajena
y cuando el impulso llega
la química de una dendrita oscurece,
reflejo involuntario de cada imagen
muriendo en el cortex,
así de lóbulos sin luz,
ni drogas rehaciendo noches
se pierde visión que te duele.
Amagar una lágrima,
recoger la bilis expulsada
cuando el corazón no palpita
y sobre el suelo se pierde el iris
en neblina que de a poco
va borrando tus pasos
cuando fuiste espalda alejándose.
Un delirio de
Adrian
en
21:32
0
Intranquilos
Poemario: Desde el ocaso del alma
miércoles, 19 de diciembre de 2007
Derramando el cerebro
Los buitres del pedestal cielo
ahondan suerte maldita del verso muerto,
destino del caos teórico e insepulto
cada vocablo hueso enmohecido.
Donde los ojos oxidan el olvido
surgió la mirada de ácida lágrima,
y estos murciélagos de los sueños
rabiando en cavidades blancas
usurpan los estados de la materia.
Restos, solo festín de lo que no importa,
selva de acero en las costillas
derramando el cerebro,
partiendo la espina dorsal sumergida
en cada lámpara apagada.
Interruptores del grano de arena que no cae
cada espasmo de los picotazos
cuando en vendaval de luna roja
acuden a mí de la vida los lamentos.
Un delirio de
Adrian
en
21:45
0
Intranquilos
Poemario: Desde el ocaso del alma
martes, 18 de diciembre de 2007
Cuando mueren los recuerdos
Pálida sombra
que el suelo absorbe
es este cuerpo
sediento del espejo
espina de la memoria,
ráfaga del verano frío
que sustenta
la bitácora
de un dolor añejo.
El relámpago
que cortó la noche
quemó cuanto
de niñez apreciaba,
y morir... morir en cuanto
la verde sangre
drenó a la tierra.
Todo reflejo fue polvo,
los tobillos tortura
de los pasos falsos.
Quedarme bajo la lluvia
descomponiendo una lágrima
y una dedicatoria
bajo mi lengua.
Un delirio de
Adrian
en
21:49
0
Intranquilos
Poemario: Desde el ocaso del alma
domingo, 9 de diciembre de 2007
Realidad vidriosa
Una campana tembló,
ocupó mi cuerpo
estos días que la nada
se hizo eterna,
y la muerte durmió
al pie de la cama.
La bilis que fueron mi ojos,
borró tus dientes
de mis pliegues neuronales.
Es así, nada, solo huesos.
Maletín de órganos
que respiran sin cierre,
radiografía sonriente.
La flor marchita que sembré
despertó con las espinas
bostezando en mis manos,
tacto de sangre sin grito,
piel sin poros abiertos.
No queda más
que recoger las sábanas,
quemar los vestigios
de la realidad vidriosa
que la garganta clama.
No se despierta
de lo que no se es,
la llama azul de un mechero
sirve de consuelo
para el dolor que no calla.
Y el infierno es vida
si en el presente
todo es silencio, cruz maldita,
sin palabras ni confianza.
Un delirio de
Adrian
en
17:16
0
Intranquilos
Poemario: Desde el ocaso del alma
sábado, 8 de diciembre de 2007
Hijo mío
Hoy quiero cantarte
hijo que no tengo,
del sueño que eres
en mis días y noches.
Te juzgo travieso
si me miro en el espejo,
pero agradable angel
que en mis brazos duerme.
Si supieras mi deseo
de verte en la realidad
que cuando otros niños
cruzan mi camino
imagino tu sonrisa y abrazos.
No estás hoy
porque los planes son malos
cuando la felicidad falta
y querido mío,
te quiero sonriente
rodeado de cuatro manos
que te idolatren.
Mañana hijo mío
sé que estarás en mi cama,
tirando todo al suelo,
jugando con tus pies pequeños,
haciendo un festival de almohadas.
Feliz te quiero, saludable,
cariñoso y respetuoso,
devolviéndome el alma al cuerpo
las tardes en que regreso del trabajo,
ser el orgullo de tu madre.
Un día vendrás
sin el cuento de la cigueña,
crecerás y seguirás siendo un crío
frente a mis ojos que te sueñan.
Entonces hijo mío
no desesperes,
que le demora de tu llegada
ha sido el derrotero triste
de mis caminos.
Pero si de algo estoy seguro
es que no me iré de este mundo
sin conocerte.
Un delirio de
Adrian
en
17:10
0
Intranquilos
Poemario: Despertares, Somos
viernes, 7 de diciembre de 2007
Crisálida
Anfibio de mis amores
volví a la tierra que me sedujo,
el rayo de sol que me diste
se esfumó con la primera brisa
de un arbóreo estornudo.
Busqué tus huellas
en cada hoja depositada
en el fértil laberinto de tu vida,
pero volabas marcando las nubes.
Entonces me perdí
por buscarte donde no debía,
y no percatarme al conocerte
de tu cercana crisálida.
Un delirio de
Adrian
en
17:19
0
Intranquilos
Poemario: Desde el ocaso del alma, Despertares, Flor del hielo, Somos
Pretexto
En el centro
del sol hay una caverna
que resplandece
con los huesos
de mis muertos,
no son cenizas, no,
son puntales
para el amasijo
de hidrógeno y helio
que desgarra la piel
y la carne.
La luz no existe
sin la oscuridad,
ni la vida sin la muerte,
el sol solo un pretexto.
Un delirio de
Adrian
en
17:12
0
Intranquilos
Poemario: Desde el ocaso del alma
viernes, 30 de noviembre de 2007
Mar lloroso
Un delirio de
Adrian
en
17:06
0
Intranquilos
Poemario: Desde el ocaso del alma, Despertares, Flor del hielo, Somos
martes, 27 de noviembre de 2007
Segregando olvido
El coro de tus manos en mi cuello
estrangularon aliento que soñó luna llena.
Es en el último estertor de mis visiones
que superlativa de sexo hiriente
desangraste la carótida de mis ideas,
saboreaste mi corazón aún palpitando,
mordida que fue dolor en mi cuerpo inerte.
Descuartizas toda evidencia que te acuse,
olvidando mis ojos al pie de la verja
donde retengo tu foto silente en mi retina.
Así desaparezco en la crueldad de tus recuerdos,
segregando olvido en la fosa común de los sin nombre.
Un delirio de
Adrian
en
16:54
0
Intranquilos
Poemario: Desde el ocaso del alma